ISADORA DUNCAN

por Adrián Olender



"Nací a la orilla del mar. Mi primera idea del movimiento y de la danza me ha venido
seguramente del ritmo de las olas…"

"Lo que es contrario a la naturaleza no es bello"

ISADORA DUNCAN


Isaora Duncan DanzaIsadora Duncan nació el 27 de mayo de 1878 en San Francisco, California.
Muy tempranamente a los cinco años manifestó a su familia su deseo de ser bailarina.

En su arte se vislumbró la necesidad obsesiva de encontrarse a sí misma por el vacío que le dejó la ausencia de su padre, el banquero Joseph Duncan y la sensibilidad artística de su madre, Mary Dora Grey, quien interpretaba para ella y sus hermanos obras de Beethoven, Schumann, Schubert, Mozart o Chopin.

Su nombre original fue Ángela, pero desde pequeña adoptó el nombre de Isadora.
Su vida estuvo marcada por los recuerdos maternos: las clases privadas de piano con las que su madre mantenía el hogar, las teorías innovadoras sobre feminidad, la vida seglar y el ismo, fueron configurando el espíritu libertario de Isadora.

Isadora duncan danza modernaLa escuela le parecía una cárcel y por eso la abandonó. Su verdadera educación fue escuchar cotidianamente música clásica. El ritmo y la sensibilidad reverberaban en su alma.
Alguna vez, cerca de la playa, los vecinos vieron a la solitaria niña imaginando y creando movimientos con sus manos y sus pies, representando el movimiento del mar.

En la adolescencia, una bibliotecaria la acercó a la literatura y la filosofía. Basada en la imaginería romántica de Keats, el realismo poético de Whitman y la crudeza de Nietzsche, forjó su propia teoría de la danza. Estudió los movimientos de la danza griega en jarrones de la época clásica conservados en el Museo Británico de Londres. Basándose en esta investigación, crea una obra que presenta en Londres y varias ciudades europeas.

isadora duncanA los 17 años viajó a Nueva York e ingresó a la compañía de Augustin Daly quien le abrió las puertas para presentarse en varios escenarios. El resto fue una sucesión de asombros, incertidumbres y éxitos.

Los críticos no soportaban ver a una mujer irreverente que bailaba descalza, con una túnica y sin maquillaje, pero admitían que en su danza había un arte original y apasionado.
En 1902 compra cerca de Atenas la colina de Cópanos para establecer un templo de la danza, proyecto que no concluyó por cuestiones económicas.

Regresó a Berlín e inició una modesta escuela de ballet pero en 1913 interrumpe sus actuaciones ya que sus dos hijos mueren en un accidente. Luego trata de fundar sin éxito su escuela en distintas ciudades europeas.

En 1921, por invitación del gobierno soviético, se radica en Moscú. Al año siguiente contrae matrimonio con el poeta ruso Serguei Esenin, quién se suicida en 1925.
Isadora, además de su belleza, poseía un poder de seducción que la mantenía rodeada de amigos, entre los que se contaban intelectuales, pintores y poetas, así como de numerosos admiradores que deseaban conocerla. La cautivación que ejercía entre los que le rodeaban, determinó que empezaran a ligarla amorosamente con múltiples pretendientes y pronto surgió el mito de que Isadora acarreaba la desgracia a las personas a quienes amaba.
Entre sus amores estuvieron Iván Miroski, Oscar Berege, Heirich Thode y Edward Craig. Con ninguno se comprometió, porque le gustaban las relaciones libres.

Su amor por el arte rebasó su propia existencia, pues jamás permitió que la pareja, la familia o las necesidades económicas obstaculizaran sus planes de revolucionar la danza.
Isadora mantuvo su peculiar postura ante la vida: se consideraba atea, practicaba el amor libre. Fue un ser libertario que jamás sucumbió a los formalismos y que no se dejó encasillar. Manifestó una opinión positiva acerca de la Revolución Rusa. Su concepto estético reivindicó el culto, el rito y la naturaleza del cuerpo.

Los movimientos libres y fluidos que expresaban emociones internas, eran característicos de su danza. En sus actuaciones se vestía con una túnica transparente, con los pies, brazos y piernas desnudos y su largo cabello suelto. Isadora Duncan estaba convencida de que no era su cuerpo el que bailaba, sino su esencia, su alma, su interior.

Ejerció una enorme influencia en muchos coreógrafos, entre los que destacan los estadounidenses Ruth St Denis y Ted Shawn.

En 1926 publica " Mi vida" Su capacidad de innovación artística fue extraordinaria, así como dolorosa fue su vida. Murió de manera absurda en un accidente de auto en Niza, el 14 de septiembre de 1927.



Isadora Duncan en el árbol genealógico de la Danza dell Siglo XX

genealogia historia de la danza